martes, 17 de agosto de 2010

redireccionando

felaciones tras felaciones he vespertino rituando los arbustos contusos de tus manos, y minando las cascabeles sierpes de tus múslulos, para asirte de diciempre para abajo, en una vendimia total de amor y vino,
___________en un día en el que el día era mi día y mi noche, esa suave herida de tu sexo, que ha vejado tu sexo, mi vida, acaece elaire. y tu aire y mi aire de noche en la noche cuando la noche es noche y la suave paz de tu cuerpo me embiste, respeto, cada día, las parafras
ese aliento que es mi aliento con tu aliento y que gime, en una mañana que oradará la memoria,

y, ¡ay!, así, qué rico en esta eternidad de lobos feroces y cantantes

2 comentarios:

Monótono Tono dijo...

mi ramoncito, me haces falta ramoncito, tú con tu sexo y tu sexualidad y tu risa tímida y tú me haces falta, cabrón... la vida se me viene encima y tú ni pío. te quiero, no lo olvides

SOMBRA FALSA dijo...

Felicito excelente texto!!
me ha encantao ;)
(me asomaba, por Diana Chan...)

Saludos,